Es un día agitado hoy para Destiny. Esta mañana pude saber que Bungie se tomaría una pausa técnica para arreglar un glitch relacionado con la munición pesada, y como consecuencia no se celebrarán las Pruebas de Osiris esta semana. En cualquier otro momento, hubiera esperado una avalancha de bilis repartida por internet, pero hoy… no.

El fatídico hueco en blanco en el calendario de actividades extraescolares del hermano Vance ha sido ensombrecido rápidamente por un evento inesperado y extraordinario: la filtración del supuesto próximo desembarco de contenidos de Destiny. Empuñando un hacha bañada en fuego y acompañada por una manada de lobos de caza, la ilustración de Lord Saladino, gerente del Estandarte de Hierro, viene acompañada por un título: Rise of Iron.

Debemos esta suculenta imagen a un usuario de Reddit que subió la imagen al mismo portal y la retiró en poco tiempo por miedo a poner en peligro el trabajo del amigo que se la mandó. De poco ha servido, puesto que el tiempo en el que estuvo a disposición de cualquiera fue bastante y sobra como para que otro usuario descargara y volviera a subir la fotografía al mismo foro. El post en cuestión sigue abierto y sigue siendo la comidilla de internet en las últimas horas, al punto de que el influyente portal de entretenimiento Kotaku ha podido contrastar la información con dos fuentes distintas cercanas a Bungie, quienes han podido corroborar la veracidad de la imagen. Se trata de la nueva expansión de contenidos de Destiny.

E incluso ha podido reunir algunos detalles más. La expansión en cuestión tendrá un volumen de contenidos algo mayor que los DLCs de año 1 La profunda Oscuridad y La Casa de los Lobos ─sin mayores especificaciones─ y tendrá una nueva incursión que originalmente se había planteado para el segundo de ellos. Todo esto ya os lo habíamos contado esta mañana, pero es hora de coger la gorra de detective y las gafas de sol: es la hora de analizar las piezas del puzzle una a una.

La aparición de una nueva expansión

Que no coja a nadie desprevenido: Bungie ya había establecido un escueto y avaro plan de contenidos a medio plazo plazo para Destiny. Una «gran expansión» para más adelante en este año, y una secuela completa del juego para el año que viene. En su día hicimos un desglose completo de esta información en Universo Destiny, aunque es el momento apropiado de destacar algunas partes de ese artículo.

Destiny es a todas luces un blockbuster, un poderoso triple A pudiente que acostumbra a presentar sus contenidos por todo lo alto en las ferias más importantes de videojuegos ─E3, Gamescom, PlayStation Experience… y así ha sido hasta hoy. El inminente E3 2016, que tendrá lugar el mes que viene, parece la ocasión idónea para presentar al público de manera oficial Rise of Iron. Atentos a la conferencia de Sony PlayStation, el lugar donde, por razones de acuerdos comerciales con Activision, ocurren las promociones de este juego.

Pistas sobre Rise of Iron

En octubre de 2014, tan sólo un mes más tarde de que Destiny vanilla llegara a las tiendas, una comunidad italiana gestionada por fans subió una foto sobre un supuesto evento de prensa en el que se veía el plan de lanzamientos previsto para Destiny. Nadie le prestó mucha atención hasta que alguien la vinculó con una información oficial contrastable. Aún hoy se debate si la imagen era válida o era trucada, pero hoy nos remitimos una vez más a ella para hablar de Rise of Iron.

Tanto La profunda Oscuridad como La Casa de los Lobos se habían confirmado abiertamente como parte del pase de temporada, pero a partir de ahí había tres nombres que nos eran un misterio: «Vex void» y «Forge of Gods».

«Plague of Darkness» resultó coincidir con El Rey de los Poseídos en un volumen aproximado de contenidos que ya se había anticipado con el nombre en clave «Comet» en el contrato de licencia entre Bungie y Activision en primavera de 2012, y no es descabellado relacionar una improvisada traducción al español «plaga de Oscuridad» con la historia detrás de Oryx y su invasión al Sistema Solar el año pasado. De forma similar, podríamos relacionar «Forge of Gods» con este Rise of Iron. Haciendo alarde de una maestría improvisatoria sin precedentes, podríamos traducir el primero como «la forja de los dioses» y el segundo, «alzar del hierro». Quizás un par de neuronas sean suficientes para hallar el vínculo entre la forja y el hierro, de modo que el título podría haber sufrido una evolución similar al que hubo de «Plague of Darkness» a El Rey de los Poseídos.

Aquel plan iba acompañado de ilustraciones promocionales a modo de avatar, pero la foto era tremendamente borrosa. El conocido youtuber de habla inglesa @LittleBigOkey trató de proveer una versión mucho más limpia y en HD en la que insinuaba que los cabal serían protagonistas de «Forge of gods», aunque es muy difícil de decir con seguridad. La realidad podría ser bien distinta y ubicarlo con los caídos en una continuación de La Casa de los Lobos de forma parecida a la que El Rey de los Poseídos es una continuación directa de La profunda Oscuridad.

Como ya dijimos más arriba, fuentes cercanas a Bungie revelaron a Kotaku que la nueva incursión estaba planteada originalmente para La Casa de los Lobos, que también estaba protagonizada por caídos, pero que se decidió dejar para otro momento.

Pasando del necesario chiste de los lobos reales que aparecen en la portada de Rise of Iron, lo cierto es que los eventos acaecidos en El Rey de los Poseídos presentan lagunas argumentales que deben ser tratadas antes de Destiny 2 en primavera de 2017. Mara Sov, Reina del Arrecife y antigua líder de la Casa de los Lobos, está muerta, al igual que una buena parte de su guardia real. En una sociedad matriarcal como la insomne, el desaparecido príncipe Uldren deja un vacío definitivo en el trono del Arrecife. La Casa de los Lobos, habiéndose rebelado contra Mara y habiendo perdido al insurgente canciller Skolas en el Presidio de los Ancianos a manos de los guardianes, están también sumidos en la anarquía. Nos hemos ocupado de dar caza a los pocos supervivientes de las guerras del Arrecife, como también a todos los posibles nuevos gobernadores. No tienen nada.

Rise of Iron bien pudiera ser una necesaria conclusión al planteamiento argumental de Destiny y, tal vez, servir de preludio para la secuela de Destiny, llámese The Shattered Suns, Beyond Destiny o como sea.

Otra posible interpretación de la imagen esté más relacionada con la figura protagonista de Lord Saladino con la manada de lobos y la palabra Iron que no puede dejar de recordarnos al Estandarte de Hierro. La sola representación de guardianes en el juego de fantasía espacial de Bungie a través del lobo puede ser perfectamente una materia de estudio. Veamos algunos ejemplos

Hay muchas referencias más, aunque quizás la más importante de todas sea la del Gjallarhorn. La bestia excepcional que se convirtió en leyenda durante el año 1 de Destiny guarda una estrecha relación con la ilustración promocional de Rise of Iron.

Antes de que el juego fuese reestructurado en verano de 2013, Gjallarhorn se llamaba Ragnarök, y su habilidad especial era la que se llamaba Gjallarhorn. El Ragnarök es un acontecimiento de la antigua cultura nórdica en el que los dioses luchaban entre sí dando lugar al fin de los tiempos, lo que en la religión cristina vendría a ser el Apocalipsis. El gjallarhorn, por su parte, es un cuerno de caza que el guardián de Asgard usaba para vaticinar el Ragnarök. Los antiguos cazadores solían usar estos cuernos para imitar el aullido de los lobos y que les ayudaran a cazar, por eso el arma de Destiny invoca granadas adicionales que persiguen a la presa después de impactar.

Durante aquel tiempo en el que Gjallarhorn no tenía ese nombre, se planeaba que fuera una recompensa entregada por el comandante Zavala de la Vanguardia de la Torre tras una misión en la que tenías que buscar los heroicos vestigios de la batalla de la Grieta del Crepúsculo, en la que los guardianes tuvieron que defender los muros de la Ciudad de un ataque concentrado de todas las Casas caídas juntas.

La Vanguardia y el Crisol nacieron poco después de esta batalla, siendo el Gjallarhorn una obra de arte manufacturada para honrar a los héroes guardianes que ayudaron a repeler a los caídos. Por esa razón tiene tantos lobos dorados tallados sobre el marfil de su cañón. De un modo parecido, Lord Saladino honra a los valientes Señores de Hierro a través del Estandarte de Hierro.

Si te fijas bien, el Estandarte de Hierro tiene lobos grabados en numerosos lugares e incluso el propio árbol del estandarte cobra forma de la cara de un lobo en el Manto de Gheleon, por ejemplo. Gheleon, Timur, Silimar, Efrideet, Skorri, Felwinter, Radegast, Perún, Jolder. Son los Señores de Hierro que conocimos en año 1. En año 2 hemos leído sobre Weyloran, Colovance, Finnala, Deidris, Hakoon, Nirwen, Ashraven, Bretomart y Tormod. Muchos lobos representan a cada uno de ellos en los diseños artísticos de las armas y armaduras del Estandarte de Hierro. Y parece que también hay lobos acompañando a Zavala en el artwork de Rise of Iron.

No me cuesta mucho imaginar por qué Lord Saladino lleva consigo un hacha en llamas si también es capaz de encender el estandarte, pero sí que me resulta inexplicable coser a Lord Saladino en la trama del juego de otra forma que no fuera siguiendo los eventos anteriormente explicados.

Si los caídos fueran capaces de repetir una batalla por la Grieta del Crepúsculo en un intento desesperado de vengar a su líder y volver al esplendor de su sociedad ─esto ya es mera especulación mía, no contrastable con el lore del juego─ entonces tendría mucho sentido ver a Lord Saladino como general, y explicaría por qué la incursión fuera eliminada de La Casa de los Lobos y trasladada como épica batalla en esta nueva expansión. Eso explicaría, también, por qué Lord Saladino ocupa por primera vez la ilustración de la portada en lugar de un enemigo como Crota (La profunda Oscuridad), Skolas (La casa de los Lobos) u Oryx (El Rey de los Poseídos). (¿Debería sumar al Viajero en Destiny vanilla como enemigo..?)

Precio y volumen del juego

El contrato de Bungie y Activision para Destiny, tal y como comentábamos anteriormente, fijaba dos grandes bloques de contenidos (juegos y Comets) complementados por pequeños DLCs. Ahora mismo sabemos qué volumen de contenidos hay en un Destiny vanilla, así como en DLCs pequeños y en un Comet.

Rise of Iron no anticipó su nombre, pero sí que se anunció como una «gran expansión» que Kotaku ha podido comprobar como «mayor que las de año 1» aunque no tan grande como El Rey de los Poseídos. Por supuesto, hay que coger esta información con pinzas.

Quizás la aparición de la asociación ficticia Eververso S.L. y sus microtransacciones, junto con la experiencia adquirida por Bungie durante los últimos doce meses, hayan permitido al live team dotar a Rise of Iron de más contenidos adicionales de los que pudimos jugar anteriormente en año 1, pero no creo que de salida tenga una cantidad de contenidos muy suculenta.

Además existe un patrón artístico que enlaza los tipos de contenidos grandes y pequeños en Destiny a través de sus iconos representativos. Tanto Destiny como El Rey de los Poseídos tienen algo parecido a un tetracornio, mientras que La profunda Oscuridad, La Casa de los Lobos y Rise of Iron tienen un rombo con el número correspondiente. Aunque sea mera especulación, auguro un volumen y precio similares al de los DLCs de año 1.